Tras el parón de la liga, por diferentes partidos aplazados, las montornesinas habían disputado un partido amistoso contra La Garriga hacía 15 días, que aunque perdieron de 7 puntos dejó vislumbrar que estaban preparadas para afrontar de las mejores maneras la recta final, tan complicada, que les espera en la liga.
Las montornesinas empezaron muy bien con un parcial de 10 - 1. El partido parecía que no iba a tener complicaciones para las locales, pero nada más lejos de la realidad, las de Montmeló no arrojaron en ningún momento la toalla y se lo pusieron difícil a las montornesinas. Montmeló aprovechó todos los despites de las locales: saques de fondo sin conexión entre sacadora y receptora, lo que en una ocasión provocó un parcial de 4 a 0 favorable a Montmeló, relajación en la defensa que aprovechaba Montmeló para realizar una canasta fácil. Las de Montmeló realizaron una defensa muy cerrada y estática, lo que obligó a las locales al tiro exterior, las montornesinas siguieron con su zona que funcionó bastante bien y en algún momento defendieron en individual. El marcador parecía una montaña rusa en la que las montornesinas en momentos se iban del marcador y por momentos las de Montmeló se acercaban peligrosamente, tan peligrosamente que al final del tercer cuarto Montmeló se puso a 2 puntos.
El cuarto cuarto fue decisivo, Montmeló que vino a remolque todo el partido se había venido arriba y tenía la esperanza de darle la vuelta al marcador, lo tenían a tocar. Pero, el entrenador del Montornès se puso serio e hizo sacar a las locales lo mejor: su garra, velocidad y acierto, de nuevo se fueron en el marcador y aunque al final hubo de nuevo despistes, el partido terminó favorablemente siendo el resultado final de 51 - 44.
Ánimo chicas, es la recta final y quedan 3 partidos, dos contra el primer y uno contra el tercer clasificado.
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